Guerra Civil en Almorox (Toledo)
Este texto ha sido tomado del capítulo dedicado a Almorox en nuestro libro Orígenes de la Guerra Civil en la comarca de Torrijos (Toledo, 2020)
El 7 de octubre de 1936 la localidad de Almorox quedó casi desierta de habitantes cuando las tropas sublevadas llegaron con la Columna Castejón al frente. La mayoría habían emigrado para nunca más volver, sobre todo los que ostentaron algún cargo público o habían participado indirectamente en algún delito. Otros, incluso de ideología conservadora, simplemente se marcharon ante el temor a los moros. Ese mismo día, el general Mola ordena, desde Valladolid, que el campo de aterrizaje de Almorox fuera habilitado para llevar los aviones cazas del sector, si sus dimensiones lo permitían. Esta decisión nos permite deducir que ya existía un campo de aterrizaje antes de la guerra civil.
Pero el alcalde Pedro Peña Adrada permaneció en su pueblo, porque no tenía nada que temer. Sin embargo, sería detenido el 12 de octubre para permanecer apresado, casi un mes, en la cárcel local. La estancia en el calabozo municipal, situado junto a la plaza de la villa, a escasos metros de la picota medieval, fue traumática porque estuvo todo ese tiempo esperando la muerte. Le acompañaban en su reclusión otros seis almorojanos: Vicente Vázquez, Matías Garrido, Carlos Tordesillas, Juan Jiménez de la Hoz y Segunda Millán Cortes, “La Melliza”, con su novio Ceferino, cuyos apellidos se ignoran.
Fotografía Columna Castejón camino de Madrid, dejando atrás la localidad de Almorox.
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